Estas últimas semanas la calefacción es prácticamente imprescindible en cualquier hogar. Sin embargo, para las personas que sufren de ojo seco, del mismo modo que con el aire acondicionado, pueden sufrir un empeoramiento en su dolencia. Hoy vamos a contarte cómo puedes prevenir estas molestias.

En alguna otra ocasión hemos hablado del síndrome del ojo seco, que no es otra cosa que una la alteración lagrimal muy habitual, provocada por la escasez de lágrimas, las encargadas de lubricar el globo ocular. Esto resulta básico para el bienestar del ojo, por eso, cuando la lágrima sufre alguna anomalía, puede provocar molestias.

Por qué se agrava el síndrome del ojo seco con el frío

Si has notado un elevado nivel de sequedad ocular últimamente, esta puede estar provocada por la falta humedad debido a la bajada de las temperaturas y la humedad, sumado al uso constante de la calefacción, que también aumenta la sequedad del ambiente y, por tanto, el picor de ojos. Este puede ser el motivo por el que la sequedad ocular se vea agravada en esta época del año.

Recomendaciones para evitar las molestias del ojo seco

Para intentar mejorar esta situación, vamos a darte algunos consejos para que puedas dejar atrás las molestias del ojo seco:

• Usa lágrimas artificiales: Estas son de gran ayuda, especialmente cuando el ojo seco se produce por las condiciones ambientales. Antes de utilizarlas, no olvides consultar con tu óptico-optometrista para que te diga si en tu caso resultan adecuadas y te recomiende las que mejor se adapten a tu problema.

• Vigila tu descanso visual: Debes hacer hincapié en cuidar el uso de la visión próxima. Establece una rutina de descanso para la visión y parpadea cada 20 minutos cuando te pongas a leer o trabajar frente al ordenador. ¡Es muy importante! Pasar mucho tiempo frente a las pantallas del móvil o el ordenador, hace que parpadeemos mucho menos.

• Protege tu higiene visual: Cuando se produce un exceso de partículas y de grasa la calidad de la lágrima se ve perjudicada. Cuida tu higiene visual, sobre todo, en la zona del párpado. No te frotes los ojos con brusquedad, y si no te queda más remedio que hacerlo, no lo hagas jamás con las manos sucias.

• Haz caso de las indicaciones en el uso de las lentes de contacto: si usas lentillas, extrema la precaución para evitar la sequedad ocular: no te bañes con ellas puestas, no superes su tiempo de uso, no duermas con ellas (salvo que hagas uso de unas especialmente indicadas para ese fin) y mantén su cuidado con los productos indicados por tu profesional de la visión.

• Hazte revisiones periódicas: Debes acudir a las revisiones visuales al menos una vez al año, de ese modo podrás saber que todo va bien y podrás corregir posibles anomalías. Si sufres de ojo seco, mucho más.

• Para evitar que empeore el ojo seco con la calefacción, es importante cambiar ciertos hábitos y sobre todo conocer el diagnóstico y las recomendaciones de un profesional, él podrá asesorarte y ofrecerte la mejor solución en función de tus necesidades.

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