El colegio de Ópticos-optometristas hacen una recomendación clara: hay que extremar la higiene de las lentes de contacto.
Su limpieza y mantenimiento es mucho más relevante de lo que imaginamos. Y es que las consecuencias de una mala higiene pueden provocar la aparición de un gran número de complicaciones visuales. «Las lentes de contacto no provocan infecciones por sí mismas, pero un mal cuidado o una incorrecta limpieza podría causarlas», asegura el decano del Colegio Nacional de Ópticos-Optometristas de España, Juan Carlos Martínez Moral que, además, considera que «un uso inadecuado provocará de inicio sintomatología de incomodidad, incluso una disminución de la calidad visual, un riesgo que también aparece por el empleo de agua del grifo para el aclarado».
Lo primero que debemos tener en cuenta es la conservación de las lentillas de un modo conveniente. Por eso es tan importante no adquirir estos productos en canales no autorizados sino en ópticas legalmente autorizadas para su venta. «Cada vez que un óptico-optometrista ve tus ojos, está realizando un chequeo de salud para detectar deficiencias y necesidades de tu sistema visual, algo que otros establecimientos no te pueden ofrecer», precisa Juan Carlos Martínez Moral.
El protocolo de empleo y cuidado más adecuado para un buen uso de las lentes de contacto es sencillo: retirarlas cuando los ojos estén especialmente irritados y no utilizarlas más tiempo del estrictamente recomendado, sino alternarlas con el uso de gafas. Además, hay que limpiarlas con cuidado de forma periódica, lavarse las manos con agua y jabón, y secarlas con una toalla que deje pelusas.
Para evitar infecciones y mantener las lentillas en perfecto estado os ofrecemos algunos consejos:
Si tienes alguna duda o estás pensando en comenzar a utilizar lentes de contacto, no dudes y acércate por Óptica Gasteiz, estaremos encantados de resolver cualquier inquietud y asesorarte de manera personalizada.